Si vos nos sos de Cali pero viniste de visita porque la sabrosura te atrajo, no te podés ir de aquí sin conocer San Antonio, el barrio más antiguo de nuestra ciudad. Se trata de un sector tradicional reconocido por la belleza de su arquitectura colonial y por la iglesia en lo alto de la colina que le da origen a su nombre.
Es una zona en donde vive el Cali viejo, cada esquina parece el cuadro de un museo y guarda la esencia del entonces porque sigue venteando igual de bueno.
La gastronomía que se mueve por estos lares es diversa, pero se destacan las pizzas, las obleas y las mazorcas de las señoras que gritan “¡Si le sale dura no me la paga!”.
Ahora, si hablamos del parche principal, tenés que subir sí o sí a la iglesia de San Antonio, allá vas a encontrar de todo un poco para hacer, como por ejemplo: sentarte a apreciar la vista de mi Cali, darte los picos debajo de un árbol con tu arrocito en bajo, comprar artesanías, o tirarte en canasta desde una loma (en esta actividad a veces uno se costalea, pero vale la pena).
Y si lo que vos buscás es un parche cultural, apto pa’ toda la familia y bien económico, están nada más y nada menos que los cuenteros, unos manes que tienen más labia que vos cuando querés conquistar a una pelada y que se saben más historias que los hermanos Grimm. Con ellos uno vuelve a ser un niño y tira caja hasta que le duelen las costillas ¡Eso sí! No te vayás antes de que pasen la mochila ¡No seás boleta! Dejáles el billetico de 2 mil pues.
Otra cosa es que, si sos fitness, esto te cae al pelo, porque estas lomas te sacan pierna y en un tour por el barrio con más colinas quedás más que hecho.
En cuanto a las tradiciones, en Cali y más específicamente en San Antonio se celebra el día de los ahijados el 29 junio. La costumbre consiste en que los padrinos llevan a sus ahijados a San Antonio, le compran una maceta (un dulce a base de agua y azúcar adornado con papelillos de colores) y usualmente se toman una foto al lado del monumento a la maceta como recordatorio. Una tradición declarada patrimonio cultural inmaterial de Colombia.
San Antonio es un barrio con calles llenas de historia y cultura. Un lugar que enamora turistas al punto de hacerlos dejar su país para quedarse a vivir en este cuento de caminos de piedra, puertas altas de madera y un destino empinado.
Por eso, si venís de España, Francia o sos uno de esos gringos en chanclas, tenés que conocer este barrio y empaparte de esta sabrosura, pa’ que entendás por experiencia propia porqué algunos nunca se atreven a irse.