Caleño que se respete es bailador de salsa, eso dicen, pero aunque no lo creás aquí nos encontramos de todo, no falta ese que tiene dos pies izquierdos, o el que lleva la salsa en la sangre, pero no le circula, y si ese sos vos, dejá de pasar pena o de pagar clases y mejor quedáte en este blog, que te vamos a contar el lugar donde se vive la salsa como es, donde si no sabés aprendés porque aprendés.
Pero vení, si vos ya sos todo un profesional de salsa quedáte también, que esta info te va servir pa´que saqués a turistear a tus amigos los gringos y dejés de decir que aquí no hay parche.
Hay un lugar que apenas con 11 años de creación en esta ciudad de 488 años, se ha convertido en símbolo representativo, porque reúne todo lo rico y todo lo bueno de esta cultura tan áspera que tenemos, y si no sabés de qué te hablamos, te voy a seguir contando más.
Pero primero una breve historia, buscándole una solución al tráfico que se armaba en toda la primera, en el 2011 deciden crear el Túnel Mundialista y en 2 años en el 2013 pesé a todos los comentarios o predicciones de que se inundaría por el Río Cali, logran terminarlo, y no solo el túnel sino el emblemático Boulevard del Río, que tal como su nombre lo indica es una larga calle ancha y larga que se encuentra ubicada a la orilla del Río Cali y encima del Túnel Mundialista, siendo hoy en día un lugar representativo pa´ nosotros.
Pero antes de continuar con todo lo que podés hacer en él, y pa´ que te sintás más orgulloso u orgullosa, tanto el Túnel como el Boulevard fueron diseñados por Elly Burckhardt, una arquitecta caleña Univalluna.
En esta larga calle peatonal podés sentir la brisa caleña que nos encanta y cobija la ciudad a las 6 de la tarde, en la que podés parcharte con tus parceros, hablar por horas, escuchar salsa de la buena y visitar los diferentes restaurantes que te encontrás en el camino.
En el Boulevard encontrás la diversidad de nuestra gente, que después de las 6 comienza a llenar cada rincón y a gritar al unísono esa salsa que nos caracteriza, esa que nos hace parar de donde estemos y movernos al ritmo de ella, mientras cantamos, aplaudimos o tocamos la campana.
Pero este blog lo comenzamos hablando de baile y por eso te trajimos a este lugar que tenés que visitar, porque cada fincho se arma un parche bien sabroso en una de las calles que desprende el Boulevard, bautizada la Calle de la Salsa, donde todos se reúnen, sin importar raza, género o nacionalidad a compartir y aprender los propios pasos, donde todos son bienvenidos y no importa si te falta ritmo aquí aprendés por qué aprendés.